El cultivo de calabacín. Origen

El cultivo de calabacín. Origen


El calabacín (Cucurbita pepo) es una hortaliza que en condiciones libres de desarrollo, sin intervención del hombre, produce varios frutos de gran tamaño, los más grandes en los primeros entrenudos alcanzan los 50-60 cm de longitud y unos 15 cm de diámetro en la madurez. Así la planta se agota con muy pocos frutos cerrando el ciclo de desarrollo y dejando la semilla para seguir multiplicándose.


A raíz del descubrimiento por parte del hombre de la utilidad como alimento del fruto inmaduro de calabacín se inició el cultivo de esta hortaliza y se comprobó que quitando los frutos en ese estado la planta seguía produciendo mientras se siguiera recolectando, tardando mucho más en agotarse. Después llegaron las ayudas, primero con el riego y el abonado y después con la selección e hibridación para conseguir mejorar las variedades.

Con todas estas técnicas de forzado se ha conseguido que una planta de calabacín pueda producir más de 10 kg de frutos inmaduros listos para el consumo.

Bien cuidado, un cultivo de calabacín termina cuando el agricultor lo decide, es decir, cuando el precio es tan bajo que deja de ser rentable o cuando llega la fecha de cambiar de cultivo, pero si en cualquier momento se dejara la planta sin recolectar esta haría lo mismo que es su evolución natural: desarrollar unos pocos frutos totalmente para producir semillas, agotarse y morir.

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